Cultivos con red sombra es una técnica de producción agrícola extensiva que se emplea para proporcionar una sombra a determinadas plantas sensibles al sol, para limitar el impacto que puedan tener los rayos UV sobre ellas. Esta técnica está indicada especialmente en zonas con climas cálidos y secos, donde la radiación solar es intensa durante la mayor parte del año. La malla sombra es una red de tela de polietileno de plástico, la cual se ensambla formando una estructura triangular con entramados de filamentos trenzados que permiten permitir el paso del aire y la luz, viga a viga, formando una semi transparencia. Esta malla se suspende en el espacio existente entre los plátanos, las plantas de café y cualquiera otra planta de porte alto, entre otros.. Esto permite sombrear los cultivos, reduciendo la temperatura, el viento y los niveles de radiación ultravioleta.
La malla sombra mejora la calidad y cantidad del producto debido a la disminución de la temperatura, la disminución del impacto de la radiación ultravioleta y la mejora del microclima que se crea debajo, disminuyendo el sudoramiento, el estrés térmico o falta de riego. Este hecho, unido al hecho de que es una técnica de bajo impacto medioambiental, la hace una solución óptima para mejorar la producción en agricultura. Entre los principales beneficios del uso de la malla sombra podemos destacar que proporciona una mejor distribución de la temperatura en el suelo, lo que mejora la germinación de las semillas y la resistencia de las plantas a enfermedades. También aumenta la tasa de supervivencia y fructificación de los frutos evitando que estos se quemen directamente por el sol.
La malla sombra disminuye la evaporación de agua de la superficie del suelo, lo cual ayuda a aumentar el nivel de humedad en el suelo. A su vez disminuye la tasa de pérdida de nutrientes a través de la disminución de las escalas microscópicas tan importantes para los cultivos. Y al mismo tiempo, también evita la erosión del suelo. Es importante tener en cuenta que el uso de la malla sombra no siempre es recomendable. Por ejemplo, puede ser una solución óptima en regiones donde hay excesivos vientos, alrededor de bosques y áreas con presencia de animales silvestres, pero puede resultar contraindicado en regiones donde la humedad del suelo es escasa. El uso de la malla sombra es una técnica ampliamente usada en agricultura para conseguir una sombra lo suficientemente resistente para soportar los efectos nocivos de los rayos ultravioletas, los vientos intensos y altas temperaturas del suelo.
Además, sus efectos positivos no se limitan a una mayor producción, sino que ayudan a mejorar la calidad de los alimentos y a proteger los cultivos de enfermedades, incrementar la vida útil del suelo y conservar la biodiversidad. El uso de un cultivo en sombra o malla sombra es una práctica muy común en la agricultura, ya que se trata de una técnica que permite que los cultivos reciban la cantidad de luz solar que necesitan. La malla sombra es una malla clara o translúcida, flexible y resistente que cubre los agricultores o viveros. Esta malla se instala en la parte superior para darle sombra a los cultivos y mantener un nivel óptimo de humedad, viento y luz solar.
Desde protección de cultivos de sol y viento, hasta la protección de frutas y hortalizas. También pueden usarse para la conservación de suelos en la agricultura orgánica. Además, se usan como protección contra la amenaza de insectos. Esta malla sombra se debe comprar según el tamaño del terreno que quiere cubrir, dependiendo de la variedad de cultivos de los que se disponga. La malla sombra está disponible en varios tamaños y materiales diferentes, como el algodón, la lona, el polietileno y el polipropileno. También está disponible en colores diferentes, desde el blanco hasta el negro más oscuro. El uso de la malla sombra mejora los rendimientos de los cultivos al mantenerlos frescos en los periodos más calurosos.
Los niveles de luz solar que se reciben por debajo de la malla sombra son mucho más altos que los recibidos por encima de ella. Esto permite un aprovechamiento de la radiación solar y una mejora en la tasa de crecimiento y desarrollo de los cultivos. Además, la malla sombra reduce la temperatura en un área específica del terreno, ayudando a prevenir la pérdida de humedad en el suelo, conservando importantes nutrientes y promoviendo la calidad de los productos. La protección de las hortalizas, previene enfermedades y reducir la competencia por la luz solar, son algunas de las utilidades de tener la red sombra. Sin embargo, hay algunas precauciones que se deben tomar cuando se usa esta malla.
Hay que tener cuidado de no cubrir una zona grande, ya que esto inhibe la producción de los cultivos afectando la maduración de los frutos. Además, debe regularse el riego de los cultivos para evitar la condensación de la humedad en la malla sombra. La malla sombra también ayuda a minimizar el riesgo de enfermedades en los cultivos. Mejora la dispersión del aire y el flujo de luz, al mismo tiempo que evita la proliferación de enfermedades causadas por el sol. Esto es especialmente importante en el caso de cultivos frutales y hortícolas, pues los frutos maduran con mayor calidad. En general, el cultivo en sombra o malla sombra es una excelente alternativa para mejorar la calidad de los cultivos, aumentar sus rendimientos y mantener los niveles de humedad apropiados para la preservación de nutrientes en el suelo.